Si estas leyendo este articulo, una de las razones puede ser que ya eres jefe de equipo y quieres mejorar, enhorabuena!

Otra coincidiría con que todavía no eres jefe de equipo pero aspiras a serlo, enhorabuena también!

Podría ser también que tengas un mal jefe de equipo, en este caso paciencia, mucha empatía para entender y comunicarte mejor con él, de manera que le ayudes y te ayudes, y por último, piensa que esta persona te hace crecer indirectamente, y que cambiarle a él no está en tus manos, aunque aspirar a ser lo que tú desees y adaptarte tu, sí, que sea difícil, no quita que sea el camino a seguir.

Si no se da ninguno de estos tres casos, estaré encantada de que me hagas saber tu razón para invertir tu valioso tiempo en leer este articulo, seguro que aprendo mucho de ti.

Entrando en harina y en el foco del artículo de hoy, lo primero que tenemos que matizar es la diferencia entre grupo y equipo.

Grupo de trabajo es un conjunto de personas que realizan dentro de una organización una labor similar, cada uno realiza su trabajo y responde individualmente del mismo.

 Equipo de trabajo es un grupo de seres humanos que se reúnen y trabajan en conjunto para alcanzar una meta en común. Para esto, el equipo mantiene una cierta organización que le permite conseguir sus objetivos.

Hoy en día los grupos en las empresas ya no tienen sentido, la época de la productividad a través del máximo rendimiento individual acabo hace tiempo, si no hay equipo, si no eres parte de un equipo, si no ves tu misión y aporte a un equipo estas fuera del mercado de la supervivencia laboral, de la satisfacción en tu desarrollo profesional.

Te cuento esto, pues el primer requisito que debe cumplir un buen jefe de equipo es entender qué es un equipo.

En el pasado no extrañaba que un jefe presionase o recriminase individualmente a los trabajadores, hoy en día a parte de estar muy mal visto, no tiene sentido, pues no conseguirá sino pequeños resultados a cortísimo plazo, con un desgaste emocional grande para su equipo y para él mismo. El equipo responde en su conjunto, independientemente de que haya un portavoz.

Cada persona es única y aunque las personas tenemos muchas cosas en común, un buen jefe descubre la habilidad especial de cada persona del equipo.

Ha de conseguir además que estas habilidades y el reparto de tareas tenga una buena coordinación y coherencia orientada al resultado.

La orientación al resultado la conseguirá de las personas con una buena definición de objetivos, teniendo claro que son realizables desde el equipo actual y con una buena comunicación hacia las personas.

En un buen equipo de trabajo las jerarquías se diluyen: hay un jefe de equipo con una serie de colaboradores, elegidos en función de sus conocimientos, y que funcionan dentro del equipo en pie de igualdad aunque sus categorías laborales puedan ser muy diferentes.

Como buen jefe de equipo has de vivir como uno mas, olvidando la palabra jefe y actuando simplemente desde tu misión como miembro.

Una de las características más importantes, y al mismo tiempo, más bonita de un buen jefe, es la de trabajar en el desarrollo y crecimiento de las personas del equipo o responsabilizarse de que esta parte quede cubierta por otra persona interna o externa.

El trabajo en el desarrollo de las personas  hará conseguir su compromiso, notarás su satisfacción personal y  hará que todos disfrutéis más del trabajo. Es un efecto sinérgico sin duda.

Cómo se hace? Empieza por centrarte en las cosas positivas de cada persona y házselo saber. Sigue por poner siempre pequeños retos acanzables con plena confianza de que lo pueden conseguir. Esto es un buen comienzo, seguro que desde ahí tu también creces y ya no paras de ponerte “pequeños grandes retos”. Esto es, motivación interna, y es la energía y gasolina de cualquier buen equipo.

Somos personas y es normal que haya sitiaciones y dias en los que todo parece imposible, para ese autobús, bajate y vuelve a subir en el autobus alegre y que cree en uno mismo y los objetivos definidos; cambiar las cosas no es cuestión de un día intenso, sino de trabajo suave y continuo muchos dias, ten paciencia.

Por último ¿Qué pensarías de alguien que te recomiendo o incita algo y su actuación muestra justo el mensaje contrario? Si ya lo has pensado no hace falta que te diga más sobre ello

Te dejo un pequeño resumen de las siete claves que venimos tratando juntos en este artículo con tres últimas recomendaciones para ser un buen jefe y persona

  1. Entender qué es un equipo.
  2. Seguimiento de responsabilidad y objetivos colectiva.
  3. Detectar las habilidades especiales de cada miembro del equipo y hacer un todo de las partes.
  4. Predeterminar los objetivos sabiendo que son realizables.
  5. Comunicar correctamente.
  6. Olvidarte de la palabra jefe y centrarte en tu misión y necesidades hacia el equipo.
  7. Trabajar para el desarrollo y crecimiento de las personas de tu equipo.
  8. Subir cada día al autobús de los optimistas.
  9. Creer y provocar el cambio de forma suave y continua
  10. Practicar y ser ejemplo de cada cosa que pidas al equipo.

Esto es una parte de mi forma de verlo, tu parte de la forma de verlo seguro que ayuda a hacer un todo mejor y más completo. Gracias por tu aporte!!